ÁGUILA IMPERIAL, BÚHO REAL, CIGÜEÑA NEGRA...

¡VALIÓ LA PENA!

Tras muchas dudas con la predicción del tiempo de ir o no a Monfragüe  a pajarear y  a la FIO a curiosear, decidimos arrancar... 

Maravillosos paisajes y buscando en cada roca, en cada Encina, en cada camino, cada una de las criaturas que allí disfrutan de su privilegiado hábitat.

El viernes llegamos ya un poquito tarde, así que nos dedicamos a fisgar por Villarreal de San Carlos, lugar donde se desarrollaba la FIO (muy bien organizado con todo el follón de coches que había tanto el aparcamiento como todo los demás, siendo la gente que allí trabajaba muy agradable). Este pueblecillo me encanta, sobre todo, fuera de estas fechas que es cuando solemos acudir, para desde allí iniciar las rutas para disfrutar del parque.

Ojeamos programa, cenamos y a acomodarnos al camping para prepararnos para las sorpresas que seguro nos deparará el fin de semana.

Comenzamos la mañana dando un volteo por el Salto del Gitano, 

y primera pareja: 

¡a la derecha el ÁGUILA IMPERIAL!

¡LA CIGÜEÑA NEGRA!

Y COMO NO.... ¡LOS BUITRES LEONADOS! deleitándonos con sus idas y venidas

en su nido con los huevos...

Volvemos a la FIO, para la charla del club de los Jóvenes Pajareros de Burgos, 

y  la de mi nuevo descubrimiento Gorka y su blog gorkagorospe.wordpress.com. Divertídisima y blog totalmente recomendable, maravillosos e irónicos dibujos en ocasiones, gran charla.

De camino al mirador la Portilla del Tiétar, dos pequeñas Tarabillas

 ¿conseguís verlas?

Llegamos a la Portilla y parece que siempre la encontramos esperándonos, nos deleitó con sus vuelos y encontronazos con los Buitres Leonados. 

Un Azor, ¿cómo lo distingo? gracias a Diego que nos reencontramos allí junto a Eva y nos ayudó, (la foto es más que nada testimonial, porque tampoco había visto nunca ninguno).

Y ya una cuestión totalmente de fe, y de creer en quienes le vieron entrar en la Encina, 

¡EL BÚHO REAL!, a la izquierda del tronco. 

Un poquito más adelante veréis algo más...

Volvemos a San Carlos y como es habitual el zorro buscando comida, es triste, pero ya espera en cuanto ve a la gente, será su perdición. 

Por último, las cañitas que nos hemos ganado, junto a más pajareros que nos reencontramos durante la tarde

De derecha a izquierda: Jorge, Diego, Portillo, Eva, Nemes, Belén y Jesús.

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